¿Algunas vez te imaginaste utilizar unos pececitos para tu montar tu propio emprendimiento? Pues Daniel Álvarez e Ivette Quinto sí lo hicieron, y por este motivo decidieron abrir Fish Spa Ecuador.
Esta pareja de casados llegó a Ecuador desde España en septiembre, con la idea de utilizar a los peces garra rufa como servicio terapéutico y estético. Este pez, también conocido como pez doctor, remueve con sus ventosas la piel muerta o con infección; además, segregan una enzima llamada dithranol, que es utiliza en cremas para hidratar y rejuvenecer la piel.
Daniel cuenta que desde siempre tuvo la idea de tener su negocio propio en su país de origen. “He tenido algunos trabajos, pero siempre quise tener más. Analizando y realizando estudios de mercado me di cuenta de que en el país no existe la ictioterapia y coincidió que mi papá sufre soriasis (enfermedad dérmica) y estos peces ayudan a combatirla, además de mejorar la circulación”.
Este emprendedor recuerda que no fue fácil para estos peces adaptase a nuestro medio, ya que previo a su apertura estos animalitos se estaban muriendo, poniendo en riegos su negocio.
Fueron días difíciles, asegura Daniel y recuerda que pasaba junto a los peces todo el día para asegurarse de que estuvieran en buen estado y estar atento a cualquier anomalía que presentaran. “Estuvimos haciendo pruebas antes de abrir, esto para que ellos (peces) se adapten, ya que no es lo mismo que estén aquí que en Barcelona”.
Aunque los garra rufa son originarios de Turquía, la tendencia de utilizarlos como terapia de relajación y estética se ha regado por ciudades de toda Europa, como Barcelona, donde Daniel recibió asesoramiento de personas especializadas para poder montar su emprendimiento en Ecuador.
“Lo que quería era traer las tendencias que hay en Europa y establecerlas acá para que vean los beneficios que estos traen”, comenta este emprendedor, quien ya tiene más de tres meses con Fish Spa Ecuador, ubicado en la ciudadela La Alborada, en Guayaquil.
Los planes a futuro de esta empresa son tener un espacio mucho más grande que pueda albergar piscinas de gran tamaño para que las personas puedan entrar de cuerpo entero al encuentro con los peces.
Actualmente, ya están atendiendo a personas con problemas de piel, además de hacer servicio de manicure y pedicure como complemento. También ofrecen el servicio de diseñar y construir tanques de vidrio para empresas o personas naturales.
Cuenta que entre sus clientes “han tendido de todo”, desde personas encantadas y curiosas por saber sobre este tipo de tratamiento, hasta personas reacias a darle una oportunidad a los peces.