Tres de cada diez ecuatorianos que se unieron al sistema financiero formal entre 2019 y 2024 son el Instituto de Estudios Económicos de la Universidad de San Francisco de Quito (USFQ).
Las compañías declararon el jueves que 1.1 millones de nuevos clientes de crédito para el sistema financiero de Ecuador se han incluido en los últimos cinco años, 398,000 de ellos cayeron en una cartera castigada o una demanda.
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Las provincias con el mayor porcentaje de personas que nuevamente están excluidas del sistema son las guayas costeras, cuya capital es Guayaquil con 33 %y manabí con 27 %; Mientras que Pichincha, cuyo capital es Quito, registra el 22 %. Estas tres áreas concentran casi el 60 % de los afectados en el país.
Diego Grijalva, director del Instituto de Estudios de Empresas de la Universidad de San Francisco, dijo esto El fenómeno ocurre cuando una persona que ya forma parte del sistema financiero tiene dificultades para cumplir con sus obligacionesLo que nuevamente excluye de las ventajas de acceso a préstamos y otros productos financieros.
Por su parte, Valeria Llerena, directora gerente de la RFD, dijo que la integración financiera «no solo puede ser una puerta de entrada», sino que debe ser «una forma sostenible».
«Este datos nos obliga a pensar en la necesidad de mecanismos sólidos para evitar este revés, ya que la rexusión financiera no solo afecta a aquellos que lo sufren, sino que también debilita la estructura económica del país», dijo.
Efectos más grandes en hombres y jóvenes
El análisis señala que esta nueva exclusión afectó más a los hombres que a las mujeres, desde abril de 2019 y septiembre de 2024, 245,000 hombres abandonaron el sistema financiero en comparación con 153,000 mujeres.
Además, los jóvenes menores de 25 años han tenido el grupo con poco acceso al financiamiento, «un aumento significativo en los niveles de reanimación financiera», dijeron las organizaciones.
Entre 2019 y 2024, el número de jóvenes aumentó de 2.800 a 19,500. «Dado que este grupo se encuentra en las primeras etapas de su ciclo financiero, esta situación puede influir significativamente en sus posibilidades de desarrollar y futuras actividades productivas», agregaron.
Los datos también reflejan que La nueva exclusión tuvo un mayor impacto en las personas que ganan menos de 800 dólares estadounidenses por mes. En este segmento, el número de personas aumentó en un 46 %, es decir, en el período analizado de 523,000 a 763,000.
En vista de estas cifras, Llerena dijo que es importante aplicar instrumentos para la educación financiera en la población más afectada. «Esto debe ir acompañado de pautas y medidas coordinadas, y por otro lado, están buscando alternativas dentro de las instituciones financieras que les permitan aliviar su carga financiera», concluyó. (I)
