Tomar mejores decisiones en el trabajo es uno de los actos más poderosos para inspirar confianza en los líderes y gerentes. Sin embargo, muchos emprendedores son aprensivos sobre el tema.
Algunos prefieren no decidir, mientras que otros simplemente posponen las cosas. De cualquier manera, no decidir es por lo general una salida fácil y no fomenta precisamente la inspiración al resto de trabajadores.
Si aprendes a tomar mejores decisiones en el trabajo serás visto como un mejor líder y obtendrás mejores resultados en general. Aquí te dejamos algunos consejos para tomar decisiones rápidas y bien pensadas:
Deja de buscar la perfección:
Muchos grandes líderes preferirían un proyecto o informe que esté con solo el 80% a primera hora, a que el informe esté terminado al 100% después de un par de horas. Moraleja de la historia: no esperes que todo sea perfecto. En lugar de buscar lo imposible, busca la manera de ser más eficiente en un tiempo prudente.
Enciende tu cerebro
Una idea llega cuando menos te lo esperas. Lo mismo ocurre cuando estás tratando de tomar una decisión. Con tan solo mirar las cosas desde otra prospectiva y ponerte a pensar en mejoras para tu negocio, le darás a tu cerebro la oportunidad de explorar el banco de datos para nueva información.
Resuelve los problemas
Una decisión puede resolver un gran problema, pero no todos los problemas pueden ser resueltos de esta forma. En cambio, la toma de decisiones a menudo se basa más en la intuición que el análisis.
Admite tus errores
Si te equivocaste al tomar una decisión, corrige el error y pide disculpas a los afectados. Tomar la decisión de hacer esto te generará más respeto y lealtad cuando admites que has cometido un error.