Aunque el concepto de ser emprendedor alude a un ideario común (muchas veces se entiende por emprendedor a todo aquel que sea dueño de su propio negocio) hay un mapa de características que diferencia a ocho tipos de emprendedores. O al menos así los resume la periodista española Isabel García Médez, quien en un artículo para la revista ibérica Emprendedores detalló las ocho formas de ser emprendedor. A continuación, una revisión del texto, que además relaciona a cada tipo de emprendedor con un personaje (ficticio o real) para hacerlo más cercano a los lectores.
- El visionario (Howard Hughes). Un emprendedor de este tipo es el que todo lo puede, el que es capaz de hacer varias tareas de cualquier campo y se atreve a incursionar en cualquier entorno. Versátiles y pasionales, son excelentes comunicadores y van saltando de proyecto en proyecto.
- El necesitado (Robison Crusoe). Un emprendedor por necesidad, como muchos de los que hay en Ecuador. La situación (falta de empleo quizás) los obliga a ingeniárselas para crear su propio modelo de negocio y salir adelante. La actividad emprendedora les elije a ellos y no al revés.
- El inversor (Donald Trump). Dueño de capital, decide crear una compañía motivado solo por el dinero. Su principal tarea es acumular riqueza y es común que venda sus propias empresas para luego formar otras y volver a venderlas. Su gran desventaja es que el dinero es rara vez motivación suficiente para persistir en un proyecto.
- El buscador de oportunidades (Sherlock Holmes). Lupa en mano, analiza el mercado para encontrar necesidades no satisfechas y lanzarse por ellas. De mente racional y analítica, dejan la pasión de lado y comúnmente se les acusa de tener el pecho frío. Solo emprende cuando cree que la oportunidad es ideal, sin riesgos.
- El emprendedor por azar (Forrest Gump). De los muchos que un día, quizás caminando por la calle, se topan con una idea que los hace millonarios. El azar les regala oportunidades y su principal virtud es reconocerlas y aprovecharlas.
- El especialista (Preston Tucker). Muy ducho en un área, luego de haber trabajado en ella durante mucho, se decide a ser independiente y emprender. Aunque rara vez se ocupa de departamentos ajenos al suyo (si es de Producción, pobres los de RRHH) tienen a la experiencia de su lado.
- El persuasivo (Ernest Shackleton). Motivador por excelencia, es capaz de convencer a un séquito de seguidores (algunos quizás más peritos que él) y se lanza al mercado con su apoyo. Su capacidad de emprendimiento radica en su capacidad de liderazgo, en tener fe inquebrantable en su proyecto y su terquedad.
- El intuitivo (Erin Brockovich). Tiene olfato, carisma y capacidad de enamorarse de lo que hace. Sus decisiones son casi siempre acertadas porque es capaz de intuir el ritmo del mercado.