Desde temprana edad, su padre le enseñó que el esfuerzo es el mejor acompañante para lograr las metas. Este es un consejo de vida que Manolo Lozano acogió para formarse como profesional, saber moverse en el mundo empresarial y que lo llevó a fundar Sumbawa el 6 de diciembre de 2002, una marca con 12 locales ubicados en diferentes ciudades del país.
“Es la primera cadena especializada en moda, accesorios de surf, skate, entre otros”, expone Lozano en el sitio web de esta marca, que inicialmente iba a llamarse Impossible, pero el emprendedor descartó este nombre por su connotación negativa. El reemplazo perfecto se le vino a la mente tras regresar de Indonesia, donde existe una isla denominada Sumbawa.
Actualmente, este emprendimiento es también el distribuidor exclusivo de las grandes marcas que se comercializan en Sumbawa, es decir, se encarga de vender los productos correspondientes al resto de tiendas de Ecuador. Asimismo, patrocinan a 12 atletas ecuatorianos a través del Team Sumbawa; y auspician diversos campeonatos deportivos que se realizan en el país.
Entrar a cualquiera de los locales de Sumbawa significa trasladarte a un ambiente de playa, con su música tradicional, un televisor con vídeos y el aroma playero, que fue creado especialmente para Sumbawa.
El desarrollo de los cimientos
Antes de llegar a la idea empresarial ganadora, Manolo Lozano se dedicó desde niño a trabajar para alcanzar sus propios logros y, principalmente, a alimentar su pasión por el surf que nació a los 8 años aproximadamente.
A los 10 laboró en un barco pesquero, luego fue soldador en una fábrica, participó en campeonatos nacionales e internacionales y posteriormente fue presidente de la Federación Ecuatoriana de Surf. Sin embargo, a los 19 años (1988) encontró un negocio que le sirvió como fuente de ahorro para fundar Sumbawa: la producción bananera.
Con casi 200 mil dólares como presupuesto, Manolo Lozano sintió la necesidad de realizar una actividad relacionada con el surf, por lo que eligió abrir un local que vendiera productos de las mejores marcas para dicho deporte, tales como: Billabong, Roxy, Quicksilver, Reef, DC Shoes, entre otras 10 más que comercializan actualmente.
“Comenzó como una actividad casi tipo pasatiempo… No sabía absolutamente nada acerca de la venta al por menor y todos concebimos que era cuestión sencilla. Entonces, el sueño de hacer la tienda se convirtió en una gran responsabilidad”.
Esto no significó una señal de rendición, más bien, siguió su fórmula del éxito: “Un emprendedor debe ser primero un albañil para convertirse en un arquitecto. Es muy importante la práctica, pero es completamente vital la práctica con la capacitación; se deben unir ambos aspectos”, concluye.