Las circunstancias excepcionales requieren respuestas extraordinarias. El gobierno laborista unido del Reino UnidoLa inversión de casi 3.000 millones de euros para revivir la industria del acero británico prometió una sesión extraordinaria del parlamento este sábado, actualmente en un período de vacaciones, para llevar a cabo una ley de emergencia que evita los últimos dos blastones del país en posesión del acero de acero británico, que pertenece al acero británico Steel SteelPresente y la pérdida de 2.700 empleos.
“Actuaremos con cierta urgencia, pero me gustaría dejar en claro que tanto esta situación como nuestra reacción son algo extraordinarias. Aunque estamos expuestos a una nueva era de inestabilidad globalNuestra preocupación por esta planta y las negociaciones para protegerla son los frutos de varios años ”, dijo el primer ministro Keir Starrer en una aparición improvisada en Downing Street.
La decisión se toma con un momento geopolítico crítico. La gerencia estadounidense de Donald Trump ha impuesto un 25% más de aranceles para las importaciones de acero. El Reino Unido vende una gran parte de su producción a este país, y el Partido Laborista había hecho una bandera prometedora para preservar una gran industria británica con 300 años de historia.
La compañía china Jingye compró el acero británico en 2020. Aunque no fue exitoso negociaciones con el gobierno durante meses, anunció su decisión de cerrar los dos últimos hornos en la planta de Scunhorpe en el norte de Inglaterra. Dentro de una semana, la gestión del sistema garantiza suficiente carbón metalúrgico y Bandear de hierro (bolas de hierro) para suministrar el combustible de las dos estufas y evitar su enfriamiento hasta un punto en que la recuperación ya no era posible o es muy costosa.
La Ley de Emergencia, que tiene la intención de avanzar, «otorgará al Ministerio de la Industria a hacer los poderes necesarios para hacer todo para detener el cierre de estos dos calzoncillos». «Y también mantenemos todas las opciones posibles sobre la mesa», agregó el Primer Ministro. El análisis general de la maniobra de emergencia llega a la conclusión de que es un primer paso para la posterior nacionalización del acero británico.
El Reino Unido haría que la instalación se cerrara el único miembro del G-7 que no puede producir su propio acero hecho de residentes brutos. Aunque el país tiene una historia productiva como productor de acero, ha estado compitiendo con China durante años, lo que podría reducir los precios.
No fue sino hasta 2024 que la industria del acero británico perdió alrededor de 6,000 empleos. La Compañía Tata, propietaria de la planta de Port Talbot en Gales, los dirigió solo cuando las altas estufas convencionales se cerraron y las reemplazaron con estufas de arco eléctrico, más baratas y limpios, pero no necesitan tanto personal para su mantenimiento, y pueden producir acero de alta calidad.
La compañía china ya advirtió el mes pasado que las dos últimas estufas altas que habían mantenido abiertas no eran económicamente factibles. Según Jingye, se invirtieron más de £ 1.2 mil millones (casi 1.400 millones de euros) en la compañía y que las pérdidas eran actualmente de alrededor de 800,000 euros por día. Según los últimos datos publicados, British Steel ya era responsable de casi 850 millones de euros en diciembre de 2023.
El gobierno del gobierno ofreció a la compañía para ayudar a casi 580 millones de euros para la financiación de una nueva estufa eléctrica, pero Jingye reclamó una cantidad mucho mayor. Downing Street acusa a la compañía para aceptar muchos obstáculos durante las negociaciones en las que el gerente incluso ofreció pagar el combustible necesario para mantener el horno en funcionamiento.
El Gobierno de los Strongers le pidió al principal centro sindical del Reino Unido que se uniera que inicie un proceso de suministro de acero británico lo antes posible. «Pedimos al gobierno que tenga en cuenta la oportunidad de explicar un área de infraestructura nacional crítica al acero, y esto asegura que el acero británico se use en todos los nuevos proyectos de infraestructura», dijo Sharon Graham, secretaria general de Central.
La última vez que el parlamento británico fue llamado a una sesión extraordinaria en 2021 para dar la retirada de las tropas afganas.
