La tenista rusa María Sharapova, considera por Forbes como la deportista mejor pagada del mundo con 27,9 millones de dólares ingresados en 2011, está explorando su faceta más emprendedora y ha sacado al mercado mundial su propia línea de caramelos: Sugarpova, golosinas que se venden desde el martes a través de su página web oficial a 5,99 dólares la caja.
“Ha sido el proyecto más interesante que he intentado, ya que se trata de mi propio negocio, mi inversión y mi dinero”, explicó la tenista, una confesa amante de los dulces desde niña que vio en su habilidad para preparar golosinas una oportunidad de emprendimiento. Y es que Sharapova ha explicado a los medios del mundo –que le han dado una amplia cobertura- que se animó a lanzar su línea de caramelos porque a sus amigas siempre les han gustado los dulces y chocolates que prepara en su casa.
La línea Sugarpova contiene 12 clases de caramelos blandos con chicle de diferentes formas (zapatos, bolsos, pelotas o gafas), tamaños y nombres: chic, flirty, cheeky, silly, spooky y sporty, entre otros. El símbolo de la marca son, cómo no, unos labios rojos, sugerentes de la sensualidad con la que siempre ha sido relacionada la deportista. El nicho de mercado es de alta capacidad adquisitiva: según ha dado a conocer la agencia Efe, Sharapova planea vender sus caramelos en tiendas exclusivas y hoteles de todo el mundo.
Una parte de los ingresos de la venta de Sugarpova se destinarán a la Fundación María Sharapova que se dedica a ayudar a los estudiantes que residen en las áreas de Bielorrusia afectadas por la catástrofe nuclear de Chernóbil.