Existen muchas historias diferentes en las que directores de empresas han llevado su compañía a la cúspide. Personajes como Steve Jobs, Bill Gates o Sam Walton se caracterizan por tener un proceso de pensamiento muy específico que les ayudó a innovar y dirigir lo que ahora son sus imperios y de los que han sido CEO.
Ser CEO no es una cuestión de orgullo, arrogancia o de tener los humos elevados, es todo lo contrario, es pensar en como mejorar tu trabajo, tus habilidades, tu liderazgo, darle importancia a un equipo de trabajo y tener la capacidad de escuchar son algunas de las cualidades que debes tener.
Pensar como un Chief Executive Officer te dará un extra que te llevará al éxito, por ello te damos algunos consejos para que te enfoques en ser un buen CEO.
No subestimes a tu equipo
Si eres de las personas que no le gusta trabajar en grupo y crees que las ideas de los demás no concuerdan con las tuyas y por ello trabajas solo según para terminar más rápido, pueda ser que te resulte una vez o dos, pero a la larga eso te lleva a ser un mal CEO. Un buen líder sabe reconocer el arduo esfuerzo de la gente que trabaja con y para él, el trabajo en equipo siempre es importante para el buen crecimiento de la empresa.
Nunca olvides en motivar a tu equipo y brindarles las herramientas necesarias para que puedan hacer bien su trabajo.
La innovación es necesaria
Escuchar ideas nuevas siempre son bienvenidas, un buen CEO debe estar alerta a los futuros cambios y tendencias que hay en el mundo de los negocios, sabe que la empresa no puede estar estática y quedarse con lo obsoleto.
Contactos
Saber elegir a sus aliados laborables es una buena estrategia, los contactos siempre son una buena influencia para tu negocio. Si posees esa habilidad del liderazgo y la buena comunicación, se te hará muy fácil atraer a tus futuros inversionistas.
Nuca dejes de aprender
Aprende a confiar en las habilidades de tus compañeros y empleados.
Un CEO no está en esa posición de saber todo, admitir que no sabes algo no es señal de debilidad, aprender de los demás trae sus beneficios ya sean empleados, empresas, todo cuenta ya que puedes sacar valiosas lecciones que te ayudarán a ser excelente profesional pero mejor persona. Uno nuca deja de aprender siempre seremos eternos estudiantes.
Realiza lo que te apasiona
Si uno hace lo que le gusta, lo que le apasiona, todo saldrá de manera espontanea ya que te sientes entusiasmado y más seguro, no ves tu trabajo como una carga más de la que quieres huir.
«Si haces algo que te apasiona estarás destinado al éxito de forma natural, y a un montón de cosas más que te irán sucediendo y de las que no te tienes que preocupar», afirma la directora de General Motors, Mary Ibarra .
No dejes que la arrogancia te consuma
Cuando te conviertes en jefe, es posible que esta nueva posición de “poder” te convierta en una persona arrogante y poco amigable. No olvides que, como CEO, antes de solicitar algo a tus empleados, lo primero que debes hacer es servir. Un buen directivo nunca deja que su ego y orgullo conduzca una compañía.
Fuente: Merca2.0
