El sueño de muchas personas es tener plata, volverse millonarios, pero los malos hábitos y errores que cometen con respecto a su manejo de dinero impiden construir una cultura de ahorro y no podemos tener ninguna inversión
El primer punto es tener muy claro que casi nadie se hace rico de solo trabajar y aún cuando trabajes de 24/7 tu patrimonio difícilmente llegará a ser como el de los millonarios que vemos en la tele. La clave está en invertir.
Si todo el dinero que ganas lo usas para pagar deudas o para sostener un estilo de vida que está por fuera de tus posibilidades, jamás vas a poder progresar financieramente. Puede sonar obvio, pero este es probablemente el error más común de todos.
Mientras más trabaja tu dinero, menos trabajas tú.
El mercado de valores conlleva un valor agregado que únicamente es perceptible en el largo plazo. El interés compuesto permite que tu capital inicial aumente con los mismos intereses que genera, ese incremento es exponencial en cada periodo y así se obtiene un beneficio mayor al paso del tiempo. En resumen, son ganancias de tus ganancias. Y aquí la paciencia es la clave.
La regla del 72
En una sociedad en la que vivimos acelerados, una gran forma de mitigar la impaciencia es saber como para cuándo nuestra inversión se podría duplicar.
Para ello, el autor del libro “Invirtiendo y entendiendo” nos aconseja usar la regla del 72.
Toma ese 72 y divídelo entre la tasa de interés que te esté pagando tu inversión. Pongamos como ejemplo un 4%, el rendimiento aproximado que dan los pagarés bancarios: 72/4 = 18.
Este número te dice el tiempo en el que tu inversión se habría duplicado, o sea, en 18 años.
Una vez que tenemos claro el horizonte de posibilidades, lo recomendable es acercarnos a especialistas e instituciones 100% confiables para poner a trabajar nuestro dinero.
El primer paso para llegar a la meta es involucrarte. Todos le tememos a lo desconocido, la cuestión es si es más fuerte el temor o las ganas de lograr algo grande.
Y un último tip para vencer la manía por los resultados exprés: revisa las historias de quienes se han hecho millonarios de la noche a la mañana, tal vez sean mentira, fraudes, películas o simplemente hechos aislados.
Pero también revisa historias de éxito de personas a las que les fue muy bien siendo constantes, disciplinadas, que invirtieron tiempo en estudiar sobre finanzas personales e inversiones.
Fuente: Forbes México