Es cierto que el lenguaje corporal dice mucho más de uno que nuestra forma de expresión oral, pero también es cierto que si al momento de hablar frente a un público cometemos un error, esto nos marcará con respecto a ellos. Aún los profesionales más preparados suelen cometer los más comunes errores de habla que, lamentablemente, terminan por destruir su credibilidad.
Estas formas de expresión son modismos –o conocidos también como muletillas- que los adquirimos desde pequeños, y si no los corregimos a tiempo pueden atormentarnos en nuestro futuro profesional, principalmente porque en cualquier momento de nuestra profesión tendremos que ofrecer una charla o presentarnos antes potenciales clientes.
La razón principal para suprimir estas muletillas es porque demostramos falta de dominio en el idioma, o podría dar a entender que no sabemos de lo que estamos hablando, lo cual puede afectar nuestra imagen.
A continuación te presentamos algunos de estos errores de habla que pueden matar nuestra credibilidad. Préstales atención y evítalas en todo lo posible.
Las muletillas más comunes que matan tu credibilidad:
1. “literalmente”. Algunas personas usan esta palabra como un elemento decorativo para intensificar lo que están tratando de decir . Sin embargo, según la Real Academia de la Lengua Español, el término “literalmente” significa: “Que debe entenderse en la plenitud de su sentido la palabra a la cual acompaña” o “conforme al sentido literal”. Por lo tanto, si en una presentación dices «Mi campaña atrapará la mente de los consumidores», estarías mintiendo o exagerando algo, por no decir asustando a tus clientes. Sugerencia: No lo uses.
2. “esteeeee” “emmmm”. Muletillas bien comunes que demuestra duda o falta de habilidad para un conversación fluida. Es verdad que los nervios nublan nuestra confianza ante el público y de ahí surge el miedo escénico, por lo que es inevitable no decirlas. Pero tampoco es imposible, o por lo menos trata de reducir su uso.
3. “O sea”. Hay quienes utilizan este modismo en todo momento, no solamente para introducir explicaciones.
4. “Bueno”. Muchas personas lo utilizan como una forma de introducir una conversación, respuesta, pregunta, etc. Evítalo, pues este término no le aporta nada a lo que dirás.
5. ¿no? ¿verdad?. Estas preguntas también se las usan para dar énfasis a una frase o para llamar la atención del público. Pero si se repite demasiado, puede que en verdad llamen la atención, pero no para lo que se está explicando del tema, sino para ver en qué momento dices la muletilla.
¿Cómo eliminar las muletillas?
El portal Alto Nivel entrevistó a David Navarro, Consultor en Imagen Pública y Director General de Imagen Excellence, quien mencionó que uno de los mejores ejercicios para eliminar estas muletillas es decir “todo lo que hiciste” el día anterior y darte cuenta de cuántas muletillas se pronuncian.
Una vez hecho esto, el reto es identificar cuando se está a punto de decirla y “convertirla en un silencio”… y continuar. “Para que funcione mejor te recomiendo se lo digas a alguien y no pierdas el contacto visual, así, forzarás el incremento de tu concentración”, sugiere.