Una de las bandas de rock más longevas de la historia, con ventas entre los 200 y 250 millones de discos en sus años de actividad, son los Rolling Stones, grupo de rock británico creado en 1962.
Aunque en la actualidad están entre las bandas de rock más exitosas de todos los tiempos, hubo una época en que los Rolling Stones y los Beatles parecían ser las antípodas del rock. Por un lado estaban los Beatles, con una imagen más elegante y romática, pero por el otro estaban los Stones, con un look más rebelde y seductor.
Esta imagen bien creada de los Stones se lo deben a Andrew Oldham, director y productor de la banda a principios y mediados de los años 60, pues con ella lograron venderse bien mundialmente pese a la gran competencia que había en ese entonces.
Lo que hizo Oldham es un excelente caso que puede enseñarle a los emprendedores algunas estrategias de marketing para que saquen adelante sus negocios.
El portal Inc. publicó una nota que hace referencia a esas estrategias que ayudaron a los Stones ha mantenerse en la cima del rock. A continuación te los presentamos.
Marketing de los Rolling Stones
Encuentra tu posicionamiento. Lo acepten o no, a la gente le gusta encasillar las cosas por categorías. Este acto, a veces inconsciente, influye al momento de decidir qué productos y empresas pueden interesarles o no. Con esta idea, Oldham una vez planteó lo siguiente: «Los Beatles parecían que estaban en el show business, y eso era lo importante». «Y lo más importante para los Rolling Stones fue, en cambio, mostrarlos como si no lo fueran.»
Aunque se suponía que el rock debía encarnar la idea de rebelión, los Beatles -en un principio- representaron la versión más lisa y pulida de ellos. Pero Los Stones se convirtieron en algo más. No habia uniformes idénticos para ellos; ellos eran los chicos malos del rock.
Acoge la dirección de arte. Otro consejo de marketing que propone Oldham es que cuando uno quiere que su empresa represente algo, se necesita tener el control sobre todos los aspectos de la imagen. Así que, cuando originalmente habían seis miembros en la banda –el tecladista Ian Stewart-, Oldham creó el impar «rebelde» y lo sacó de la plantilla (aunque siguió tocando con ellos sin aparecer como miembro principal). Con ello, Oldham quizo crear una imagen que atraiga la atención y, en última instancia, el dinero que querían.
Obten la atención adecuada. Llamar la atención de los clientes es clave. Y un ejemplo de este punto fue cuando Oldham consiguió que la banda añada “I Can not Get No» al principio de la canción «Satisfaction». Desde ahí, el significado más subversivo de la canción fue traído a la intemperie, y los Stones obtenían la atención que querían alimentando su imagen de rebeldía.
Escoge el enemigo adecuado. Oldham manifiesta que no está mal que la moda y las marcas orientadas al consumidor tengan enemigos, pues esto los lleva a superarse. Pero lo que sí está mal es que no consigan al enemigo adecuado. En el caso de los Stones, su enemigo designado no eran los Beatles (como muchos piensan), sino que la banda se centró en Elvis Presley, un chico malo de EE.UU, y en Cliff Richard del Reino Unido.
