Siendo el emprendedor responsable de una pyme es muy probable que tengas poco presupuesto para dar a conocer tu servicio o producto. ¿De qué alternativas dispones? Una de las más interesantes, sin duda alguna, es el Marketing de Guerrila, que plantea la “optimización de la inversión para empresas sin grandes presupuestos en publicidad buscando gran visibilidad e impacto con una inversión mínima”, indica Álvaro Andrade en una publicación del Departamento de Investigación del IDE Business School.
Este método de marketing fue acuñado por el autor estadounidense Jay Conrad, quien definió el término basándose en la estrategia militar usada en la guerra de guerrillas, que se enfoca en plantear pequeñas batallas contra un enemigo grande y lento para reaccionar, actuando y replegándose rápidamente, aprovechando de mejor manera los escasos recursos y generando la percepción de estar presente y activo en muchos frentes, explica Andrade.
Para que quede claro, dos ejemplos exitosos: Zinema Zombi y CharityCounts.com. El primer emprendimiento, un cine club de culto, se promocionó empotrando brazos de zombies en parques; el segundo, una entidad sin ánimos de lucro, dejo caer por las calles de Manhattan 8.000 billeteras para que los curiosos que las recogieran y abrieran encontraran en ellas una tarjeta que los invitara a abandonar su apetito consumista y hacer un donativo en CharityCounts.com.
Definidas por Andrade, estas son las características de Marketing de Guerrilla:
- A pesar de que no excluye a las otras, está diseñado para empresas pequeñas con bajo presupuesto.
- Debe estar orientado a nichos específicos. “Como uno de los principales objetivos de una estrategia de marketing de guerrilla es el retorno que genere, no se da el lujo de disparar a grandes audiencias”, explica Andrade.
- Debe ser eficaz y tener un timing adecuado.
- Debe estar enfocado en la psicología humana, generar una experiencia que lleve al usuario a hablar de la marca.
- En lugar del dinero, la principal inversión es la imaginación, tiempo y esfuerzo. Es fundamental pensar ‘out of the box’.
- Generalmente este tipo de mercadotecnia convive con el consumidor, que lo puede tocar y manipular.
- Si el nicho lo valora, las campañas de este tipo deben estar apoyadas en medios digitales.