Los gestores de fondos mutuos están obsesionados con el largo plazo. Comprar y vender acciones frenéticamente es la mejor manera de perder la camisa. Por eso siempre destacan la importancia de dejar intacto el capital invertido durante al menos cinco años. Para muchos, su gran referente es este. Cimientos de universidades en estados unidosFondos privados y perpetuos financiados originalmente con aportes de exalumnos y generando un rendimiento anual que cubre parte de los gastos de la institución. Una especie de fondo soberano que gestiona activos por valor de más de 50.000 millones de euros. Algunas universidades españolas y europeas están copiando ahora el modelo.
El volumen de dinero gestionado por este tipo de fondos universitarios superó los 900.000 millones de dólares en 2024, según la Asociación Nacional de Oficinas Financieras Universitarias (Nacubo, sigla en inglés). La forma en que funciona es similar a la de los fondos de pensiones: un administrador es responsable de decidir en qué activos invertir, ya sean acciones, bonos gubernamentales, bonos corporativos o activos privados, en un intento de maximizar los rendimientos mientras se controla el nivel de riesgo. Cada año se deduce una parte de las ganancias para sumarlas al presupuesto de la institución.
el mas viejo equipo el mundo es lo que fue creado por Universidad de Harvard. Fundada hace apenas 50 años, la empresa gestiona un capital de 53.000 millones de dólares (50.500 millones de euros al cambio actual). La rentabilidad media anual es del 11%, lo que supera el objetivo legal de alcanzar una rentabilidad de al menos el 8% cada año. De este porcentaje, se debería retener el 3% y distribuir el 5% para financiar la universidad. El año pasado, por ejemplo, se retiraron 749 millones de dólares del fondo para reducir las matrículas y financiar programas de investigación. Este dinero cubre el 37% de los gastos de la instalación.
En el caso de Harvard, la universidad tiene su propio gestor de activos que decide sobre la asignación del capital. Harvard Management Company (HMC) gestiona el equipo Durante 45 años ha logrado mejores resultados que muchos gestores de fondos.
Debido a su naturaleza abierta, estos vehículos de inversión pueden permitir a las universidades mantener activos ilíquidos en su cartera, como inversiones en edificios, fondos de infraestructura o capital de riesgo. Un enfoque que antes estaba limitado a inversores institucionales o personas muy ricas. Poco a poco llega al pequeño inversor.
Él equipo de Harvard es un buen ejemplo de cuán diferente es la asignación de activos en un vehículo de este tipo. Si la cartera clásica de un inversor se compone de un 60% de acciones y un 40% de bonos, en este caso las acciones sólo representan el 14%. En cambio, los directivos de Harvard prefirieron aportar el 39% del capital. instrumentos de capital riesgo: se trata de fondos que invierten en empresas de nueva creación (conocidas en la jerga técnica como). capital riesgo) u otras que invierten en empresas no cotizadas que ya están consolidadas pero que les están ayudando a crecer financiando compras a competidores o expandiéndose a nuevos mercados.
Además, dejaron el 32% de su cartera. fondos mutuos gratis (Fondos de coberturaen Inglés). Estos gestores tienen la máxima libertad de inversión, pueden comprar empresas cotizadas o no cotizadas, utilizar derivados financieros o fórmulas de apalancamiento. Su objetivo es conseguir rentabilidades positivas independientemente de la evolución de los mercados bursátiles. «El uso de este tipo de vehículo nos permite reducir la exposición a empresas cotizadas y no cotizadas y limitar así el riesgo general de la cartera», explica el gestor de Harvard, HMC, en su actual informe anual. Invertir tanto en capital de riesgo como en fondos mutuos requiere que el dinero se retenga durante períodos de inversión de más de siete años. Esta iliquidez se compensa a largo plazo con una rentabilidad superior a la de una inversión en bolsa.
Aunque Harvard es la universidad más grande y famosa, todas las principales universidades estadounidenses, públicas y privadas, tienen sus propios fondos. Él equipo Yale tiene un capital de 41.000 millones de dólares, 37.000 millones de Stanford y 35.000 millones de Princeton. El mayor fondo de una universidad pública es el de Texas con 42.000 millones. En Europa, este tipo de fórmulas de financiación van adquiriendo cada vez más importancia. Las instituciones británicas tradicionales como Oxford y Cambridge tienen sus propios vehículos de inversión, aunque son significativamente más pequeños que sus homólogos norteamericanos (algo menos de 9 mil millones de libras, alrededor de 11 mil millones de euros).
Los proyectos en España ya están en sus inicios. La Universidad de Navarra, controlada por la controvertida Prelatura católica Opus Dei— cuenta con un fondo de más de 200 millones de euros, gestionado por la Gestión de Fondo Endowment (GFED). Recientemente, la Universidad Católica de Murcia pasó a ser propiedad de la familia Mendoza, partidaria de los ultraconservadores. movimiento religioso Camino Neocatecumenal, por Kiko Arguelloy conocido como el pateará― han firmado un acuerdo con el banco andorrano Andbank para gestionar su propio banco Equipo, que funcionará bajo el nombre de Fondo Universitario UCAM.