La tendencia de crecimiento global en 2025 será consistente con la del año anterior, con un moderado incremento del 2,8%, según las previsiones económicas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). YSe está recuperando de la inflación. y la flexibilización monetaria en los últimos meses podría impulsar la actividad global, admite el informe Situación y perspectivas de la economía global.publicado el lunes por el Ministerio de Asuntos Económicos y Sociales (DESA). Sin embargo, deja claro que todavía existe una gran incertidumbre. Conflictos geopolíticos tanto en Ucrania como en Medio Oriente; los altos costos de endeudamiento de muchos países; y el Tensiones comerciales – debido a la disputa arancelaria entre la Unión Europea, China y Estados Unidos alimentada por el regreso de Trump – son algunas de las principales amenazas que “empañan el panorama”.
Asimismo, el documento señala que si bien la actividad global en 2024 ha mostrado resiliencia, el aumento del 2,8% se mantiene por debajo del promedio prepandemia del 3,2%. La ONU atribuye esto a la falta de inversión, la lenta productividad y la elevada carga de deuda que pesa sobre varios países.
Se espera que el comercio mundial aumente un 3,2%, aunque a un ritmo más lento que en 2024 (3,4%), debido principalmente a la producción manufacturera de Asia y a una recuperación del sector servicios. Sin embargo, se advierte que algunas de las economías más grandes se están inclinando hacia esto políticas proteccionistas pone en peligro estos datos.
Todos los obstáculos descritos anteriormente representan una amenaza particular para las economías menos desarrolladas y vulnerables. El crecimiento insuficiente amenaza con socavar aún más el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), conocidos como Agenda 2030, advierte el informe. En este sentido, el secretario general de la ONU, António Guterres, señala en el prólogo del informe que los países no deben ignorar estos peligros. “En nuestra economía interconectada, las crisis en un lado del mundo aumentan los precios en el otro. “Todos los países están afectados y dudan en ser parte de la solución”, exige.
Crecimiento por región
En un análisis de las economías avanzadas, las Naciones Unidas pronostican que el crecimiento se debilitará en Estados Unidos y se recuperará en la Unión Europea en el transcurso de 2025. En concreto, se espera un crecimiento del 1,9% para el primer año, nueve décimas por debajo del incremento del año anterior debido a una desaceleración del mercado laboral y a un descenso del gasto en consumo.
Mientras tanto, pronostica que el PIB de Europa aumentará cuatro décimas hasta el 1,3%, respaldado por la resistencia de su fuerza laboral y la caída de la inflación. Sin embargo, las previsiones han caído un 0,3% respecto a las de mediados de 2024. Por cierto, los expertos de la ONU señalan que el endurecimiento de las políticas fiscales, la baja productividad y el envejecimiento de la población seguirán planteando problemas para el viejo continente.
En el otro lado del mundo, se espera que Asia Oriental se recupere un 4,7%, impulsada por un crecimiento estable en China y un fuerte consumo privado en toda la región. El sur de Asia destaca como la zona con mejores resultados, con un crecimiento del PIB del 5,7%, impulsado por un aumento aún mayor en la India (6,6%).
Se espera que el crecimiento de África aumente moderadamente hasta el 3,7% en 2025 desde el 3,4% del año pasado, gracias a la recuperación de sus principales economías, Egipto, Nigeria y Sudáfrica. Mientras Naciones Unidas espera que América Latina y el Caribe suba ligeramente desde el 1,9% en 2024 hasta el 2,5%, pese a la desaceleración de una de las potencias de la región, Brasil, cuyos datos de este año (2,3%) están siete décimas por debajo de los crecimiento de los últimos doce meses.
Inflación y política monetaria
Mientras tanto, los expertos esperan que la inflación global caiga del 4% en 2024 al 3,5% este año, lo que brindará cierto alivio a los hogares y las empresas. Sin embargo, el escenario no será el mismo para muchos países en desarrollo: se espera que la inflación se mantenga por encima de los promedios históricos recientes y se espera que uno de cada cinco de estos países alcance los dos dígitos en 2025.
Los expertos de la ONU suponen que la Reserva Federal y el Banco Central Europeo Recortarán aún más las tasas de interés a medida que disminuyan las presiones inflacionarias. Para las economías menos avanzadas, las cambiantes condiciones financieras globales pueden llevar a una reducción de los costos de endeudamiento, pero encuentran que el acceso al capital sigue siendo desigual.
El informe destaca que muchos países de bajos ingresos continúan luchando con altos niveles de deuda y problemas para acceder a la financiación internacional. Al hacerlo, sugieren que cualquier espacio fiscal creado por la flexibilización monetaria debería ser utilizado por los gobiernos para priorizar las inversiones en desarrollo sostenible en sectores sociales críticos.