Existe una gran característica que destaca a los trabajadores comunes de los emprendedores. Se trata de la capacidad de tener ideas y seguido de ello, obtener la fuerza de voluntad para ir detrás de ellas. Sin embargo, esto puede convertirse también en una debilidad.
Si eres emprendedor seguramente conozcas que existen momentos en los que, a pesar de tener una idea concreta y establecida, suelen surgir ideas pasajeras que parecen buenas. Algunos emprendedores deciden abandonar su proyecto ya iniciado, para encaminarse en uno nuevo. Como ejemplo se encuentra la anécdota de un emprendedor. El mismo lanzó ocho negocios en un año, con la mentalidad de que al menos uno de ellos tendría éxito. La mala noticia al final es que ninguno funcionó, por lo que se trató de varias inversiones que se perdieron en su totalidad.
¿Por qué no es bueno abarcar varios negocios?
El pensamiento de que una idea tuya va a funcionar solo porque es demasiado buena, es erróneo. Esto se debe a que para que un negocio funcione, debes poner alma cuerpo y mente en él. Nadie inicia en la cima, por lo que el camino para llegar hasta allá es largo. Ninguna idea es lo suficientemente buena si las personas no le otorgan el apoyo y atención necesarios. Tal es el caso de Tesla, quien no creó la idea de los vehículos autónomos, pero fue quien la tomó y trabajó para convertirla en una realidad. Es por eso que pasó de ser una burla en WallStreet a convertirse en el fabricante de autos más popular en el mundo.
El punto aquí es la dedicación que debes ofrecer a tu negocio, el cual debe ser uno en concreto. Recuerda que el que mucho abarca, poco aprieta. Toma las cosas con calma y ten paciencia, el camino al éxito es lento, pero seguro.
Fuente: Emprendedores News