Jordan Belfort, mejor conocido como el lobo de Wall Street, es un extraordinario empresario que inspiró a la película protagonizada por Leonardo DiCaprio y dirigida por Martin Scorsese.
Actualmente se dedica a capacitar a empleados de todo el mundo para desarrollar tácticas de ventas eficaces mientras ofrece discursos motivacionales basado en sus errores pasados.
Just Capital es pionero en marketing digital y publicitario en Latinoamérica, crece como consorcio agrupando a empresas como Just Click Media, Just Lab, Eficads, kokowinka, Just Quiz y Uffmag.
Invitó al gran Jordan Belfort; el auténtico lobo de Wall Street ; para un conversatorio con el objetivo de incentivar a su empresa a mejorar la eficiencia de su equipo de trabajo.
El evento contó con una audiencia bastante grande en la plataforma zoom. Desde la comodidad de su casa el lobo tocó temas como: armar estrategias, ser visionario, persuadir y romper nuestros límites.
«No se trata de qué tanto dinero se pueda ganar, de hecho tuve esa actitud de puro dinero, hice cosas que no eran buenas y cometí muchos errores, mis errores fueron iguales de grandes que mis éxitos pero aprendí de eso» comenta Belfort.
Los negocios son como una fiesta, en la cual hay toda clase de personas, pero así como cualquier fiesta, ésta tiene su final, por ende siempre hay que crear nuevos planes para hacer más dinero.
Entre sus anécdotas está su primera aventura empresarial, cuando aún estaba en el colegio, fue vendiendo paletas durante el verano en las playas de la localidad, en solo una temporada, el joven, entonces de 17 años, consiguió sus primeros 20.000 dólares, cumpliendo con su objetivo de generar ingresos con sus ventas, pero una vez finalizado su meta, paró de generar ingresos.
Sé un visionario
Todo está en nuestra mente, en nuestras habilidades y talentos, creer en nosotros mismos, todas las personas tienen metas en la vida orientado a objetos, pero ese es el primer error que se comete.
Es verdad que se necesitan objetos pero siempre hay algo más allá de solo objetos, y es ser visionarios, eso es lo que nos hace exitosos.
Hay que tener visión para el futuro, las metas pequeñas no sirven para mantener una estabilidad financiera ya que esta no permite crear más cosas una vez que finaliza.
Todos los días debes hacer las preguntas de ¿Cómo nos veremos en 5 años?, ¿Dónde viviré?, ¿Cómo será mi familia y mi negocio?
Todo se trata de hacer las cosas por nuestra cuenta, tener el poder de elegir a las personas que conforman tu vida y romper toda clase de límites, esencialmente las que tenemos sobre nosotros mismos, nuestras capacidades y sobre el dinero.
Muchas veces nuestra creencias controlan nuestra acciones, limitándonos a realizar las cosas en las que creemos que no somos buenos y eso conlleva a tomar malas decisiones que nos alejan del éxito.
We Dream It We Do It!
Fuente: El Emprendedor
