La imagen es, sin lugar a dudas, el detonante para que un consumidor opte por comprar un producto u otro. El mejor ejemplo lo traen los restaurantes. Pues en su menú se detalla el nombre de los platillos, mismos que son acompañados con una foto que los muestral tal cual, o incluso una versión embellecida de los mismos. Sin embargo, existen restaurantes «modernizados» que ya no hacen uso de estas fotografías para atraer la atención de los clientes. Podrías pensar que es algo más moderno, pero la realidad es que la foto del platillo sigue atrayendo. Basta con observar en los establecimientos de comida rápida, que cuentan con inmensas fotografías de sus hamburguesas.
Producto de la importancia de la foto nació una duda muy sonada en el ámbito, ¿son mejores las fotos realistas o las que se encuentran muy retocadas?. Existen muchas personas que consideran que las imágenes deben ser lo suficientemente atractivas para llamar al cliente a comprar el producto. Sin embargo, una mayor cantidad de personas cree que lo mejor es vender una imagen que muestre la realidad del asunto. Así es como se puede tener una idea más certera de lo que se vaya a adquirir. Puesto que si la imagen está demasiado retocada, al recibir el producto final los consumidores podrían quedar decepcionados.
Se dio a conocer que para el público más joven la realidad es lo importante. Según un cálculo se pudo determinar que 2 tercios de los consumidores prefieren la foto realista antes que la retocada. La cifra cambia un poco para los adultos hasta 34 años, pues se considera que su preferencia por las fotos realistas es de 3 cuartos de la cantidad total de consumidores encuestados.
Fuente: PuroMarketing