A veces, las pequeñas cosas pueden hacer una gran diferencia. Por ejemplo, cuando se trabaja en grupo y se realiza un trabajo muchos utilizan el pronombre personal “yo” en vez de “nosotros” al explicarlo. Según un informe publicada en el Diario de la Lengua y Psicología Social, las personas que se expresaban de esta manera, solo están preocupados por sí mismos, que por las necesidades de los demás, pero esto puede arruinar tu autoridad.
Pero también hay ciertos hábitos que pueden demostrar lo contrario y evitar esto, según Angie Segal, entrenadora de emprendedores en Action Coach.
Evita arruinar tu autoridad:
– Reiner nerviosamente
Para Segal, la risa nerviosa es un signo de malestar o nerviosismo y puede ser un serio desafío a tu autoridad. “Si das una tarea, y luego de esto te ríes las personas no tomarán en serio el trabajo”. Por eso es necesario tomar en cuenta cuáles son los momentos indicados para portarse serio y ser líder.
– Evitar contacto con los ojos
El no hacer contacto visual puede arruinar tu autoridad, ya que mientras le entregas las instrucciones o noticias a un empleado y evitas mirarlo, da la impresión de que estuvieras escondiendo algo. Siempre busca mirar a las personas cuando hablas. Si estás hablando a un gran grupo, procura hacer contacto visual con el mayor número de personas posible.
– Siendo el amigo
Segal dice que los gerentes que son promovidos para dirigir a sus compañeros suelen cometer el error de ser demasiado sociables con sus empleados. Esta es una línea difícil de dibujar, ya que de no establecer una barrera, ellos se pueden aprovechar de ti, y caer en la indisciplina. Habla francamente con tus subordinados sobre las metas y expectativas que se quieren lograr, además de establecer reglas.