Él consumidor ecuatoriano Ha experimentado cambios profundos en su comportamiento, especialmente después de la pandemia.
En el contexto de la crisis económica y la acelerada digitalización, los hábitos de compra han cambiado. Si bien el comercio electrónico continúa creciendo, su desarrollo en Ecuador aún se encuentra en sus primeras etapas en comparación con otros países de América Latina y Europa.
Para las marcas y los emprendedores, comprender estas tendencias es clave para capitalizar nuevas oportunidades. José Luis Fernándezz, Gerente Regional de Ventas en Essitydice cuáles son las nuevas demandas de los consumidores Ecuador y cómo la tecnología ha mejorado las interacciones.
Escuche todos sus consejos en este episodio de la segunda temporada. Podcast Garabot.
Sugerencias para entender al consumidor ecuatoriano
- La pandemia aceleró la digitalización. La pandemia obligó a muchos consumidores a adaptarse a las compras online. Si bien aún no se ha alcanzado el nivel de consumo digital en países como Alemania o Brasil, el comercio electrónico en Ecuador ha crecido un 40%. Sin embargo, en comparación con otros países de la región, todavía está en su infancia.
- El comercio electrónico está evolucionando. En Ecuador, el comercio electrónico representa sólo el 1% de la canasta de consumo masivo, un porcentaje muy bajo en comparación con el 15-20% en los países europeos. Esto refleja un rezago en infraestructura y ofertas digitales locales.
- El consumo depende de la oferta disponible.. A diferencia de otros países, los consumidores ecuatorianos se sienten atraídos por la experiencia de compra física. Las plataformas de comercio electrónico locales aún tienen que despegar por completo, particularmente en categorías fuera de comestibles y productos básicos.
- Los ecuatorianos valoran las comparaciones de precios. En Ecuador, los consumidores prefieren acudir a tiendas físicas para comparar precios, tocar productos y “comprar ofertas”. Esto se debe a un rasgo cultural que valora el regateo y la interacción directa con el vendedor.
- El ahorro se vuelve crucial. La economía de Ecuador, caracterizada por el desempleo y altos niveles de trabajo informal, ha llevado a los consumidores a ser más cuidadosos con su dinero. El 65% de la población tiene empleos por debajo del salario básico, lo que ha llevado a los ecuatorianos a buscar precios y ofertas bajos.
- Desconfianza en las ofertas digitales. Muchos consumidores ecuatorianos desconfían de las ofertas en línea, creyendo que los precios ya han aumentado antes de que se ofrezcan los descuentos. Esta percepción representa un obstáculo para el comercio electrónico, que debe brindar mayor transparencia.
- La experiencia de compra sigue siendo híbrida. Aunque el comercio electrónico está creciendo, muchos consumidores prefieren visitar entre seis y ocho canales de venta antes de tomar una decisión, incluidas tiendas físicas, supermercados y canales de venta más informales.
- El efecto de la peculiaridad latina. A nivel cultural, los ecuatorianos, como muchos otros latinoamericanos, disfrutan de la experiencia de “comprar”. Esto significa que prefieren ver el producto en persona, evaluar opciones y sentirse en control de la compra antes de realizarla.
- La confianza en la calidad es clave. Aunque el consumidor ecuatoriano es más consciente del precio, también valora la calidad. Por ello, las plataformas de comercio electrónico deben ofrecer productos de alta calidad y con garantías claras para ganarse la confianza del comprador.