Cada año aparecen nuevas tendencias en el mundo del marketing digital que llaman la atención. Algunas de esas tendencias perduran más allá del año, y otras tienen una vida más corta.
Una de las tendencias globales que hemos visto durante los últimos años es la de la ecología. Cada vez más personas están concienciadas con el medioambiente.
El cambio hacia un estilo de vida amigable con el ambiente comienza en casa.
En 2018, Elizabeth Mera y su hija, Lizbeth Correa, decidieron dejar de usar bolsas plásticas para sus compras y empezar a elaborar sus propias fundas de tela para uso personal.
Esa idea se convirtió al poco tiempo en un negocio sustentable.
Correa, estudiante de biología de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, fue quien incentivó a su madre a dejar los plásticos de un solo uso, como las bolsas plásticas.
Al no encontrar quién las hiciera de tela, Mera se animó a hacerlas ella misma en algodón, y así empezó a llevarlas al supermercado, donde algunas personas le preguntaban por las fundas, hasta que una mujer le pidió que le fabricara una.
I’m Green
Ese primer pedido fue un impulso para emprender el pequeño negocio, que bautizaron como I’m Green y al que Correa ve más como un proyecto para generar un cambio de conciencia en la gente, sobre el impacto que genera el plástico en la contaminación ambiental.
Familiares y amigos fueron sus primeros clientes.
En mayo del 2019 se aliaron con un grupo de tres costureras, que tienen un taller en el norte de Quito. Industria Piolera Ponte Selva es uno de sus proveedores de lienzos y lonas 100% algodón.
Le compran cerca de 100 metros de tela semanales, dependiendo de la demanda de productos, indica Fabián García, asesor comercial de la compañía textil.
Emprendimiento ecológico
En la primera producción, de 500 fundas, invirtieron USD 300.
Desde el comienzo han vendido sus fundas en kits de cinco unidades, las cuales varían en tamaño y estilo; las hay de malla para los vegetales, y en lienzo, para llevar pan, granos o frutos secos.
El costo del kit es de USD 12, también, ofrecen un kit de dos fundas con puntas redondeadas, que funcionan como filtros para preparar leches vegetales.
El ingreso de la marca en mayo del 2019 a Wiksi, un ‘marketplace’ exclusivo para productos artesanales, les ayudó a darse a conocer, recuerda Mera.
Además de este portal de comercio electrónico y las redes sociales, llegan a los consumidores a través de 17 tiendas ecológicas, físicas y virtuales, lo que les permite estar en importantes ciudades del país.
Artículos que transforman al mundo
I’m Green tiene una producción mensual de 3 000 fundas.
El pasado año, durante los meses más fuertes de la pandemia, la marca amplió su oferta de productos para llegar a un público más amplio.
Entre los artículos que lanzaron hay:
- estuches para cubiertos, elaborados con retazos de telas, estilo lona, que permite llevar los cubiertos desde casa a cualquier parte.
- rondas desmaquillantes, en tela 100% algodón.
- toallas de cocina; ambos productos, reutilizables.
Gracias a la alianza con otras marcas, están desarrollando fundas para entrega de zapatos, cosméticos, joyas, sombreros, entre otros productos.
Estas fundas son personalizadas con el logo de la marca y el estilo solicitado.
Una de las tiendas en línea que ofrece los productos del emprendimiento de fundas de tela es Zero Waste Store, para la que han elaborado productos exclusivos y personalizados.
“Hemos crecido juntos. Sus artículos son muy importantes para mi tienda, son de algodón de alta calidad y local”, comenta Diana Godoy, propietaria del comercio electrónico.
Fuente: Revista Líderes