Richard Branson es uno de los emprendedores más originales de la actualidad y es conocido mundialmente por su conglomerado multinacional Virgin Group, que cuenta con alrededor de 400 empresas.
Según Forbes, Branson es la persona 329º de las más millonarias del mundo, con una fortuna de 4.8 billones de dólares. Pero la fortuna de este magnate británico no la consiguió por una simple cuestión de suerte, sino que se la debe a su originalidad y capacidad de transformar pequeños nichos en grandes negocios.
A continuación te presentamos algunas lecciones para emprender de Richard Branson, recopiladas del sinnúmero de entrevistas ofrecidas a los medios internacionales.
3 consejos para emprender de Richard Branson
“Para romper las tendencias establecidas deberías empezar por recurrir a fuentes externas”. Según este sabio emprendedor, el éxito de un negocio no necesariamente tienen que provenir de una idea original propia. “En Virgin, nuestros mayores éxitos rara vez han surgido de inventar nuevos productos o servicios; han provenido de entrar en industrias existentes y dar nueva vida a productos o servicios”, manifiesta.
En este sentido, su consejo es saber identificar un producto o servicio existente que pueda ser beneficioso a la sociedad siendo refinado, revitalizado, reempaquetado u ofrecido de una manera novedosa.
“Un gran servicio al cliente es el nombre del juego”. Para Branson, lo más importante en cualquier negocio que trabaja para las personas es ofrecer un servicio al cliente de calidad.
Y toma como ejemplo sus tiendas Virgin Records: “Era cierto que se podía comprar música en muchos otros locales, pero lo que no se podía conseguir era personal animoso y conocedor que hiciera recomendaciones excelentes en una atmósfera única y disfrutable. A lo largo de los años, nuestros clientes quizá hayan cambiado de jipis a punks y a nuevos románticos, pero nuestra atención en el servicio asombroso fue constante”, explica.
“Tener pequeños descansos puede marcar la diferencia”. Branson no tiene una receta especial para este caso, pues menciona que ni él mismo tiene una. Pero sí cree en la flexibilidad de tiempo y en la importancia de despejar la mente por un momento para quitarse el estrés. Y también para crear. “Encontrar tiempo para los pensamientos aspiracionales es vital”, profesa.