El mercado laboral vuelve a cerrar el año con noticias excepcionales para España, que logró crear medio millón de empleos a lo largo de 2024. Una vez más, gran parte de este crédito es para a empleados extranjeros: De los 501.952 nuevos empleos, 212.042 son para extranjeros. Hay cuatro de cada diez nuevos puestos de trabajo, una proporción muy superior a la que representan actualmente los extranjeros en el mercado laboral español. Están en el 12%, dos puntos porcentuales más que antes de la pandemia.
Según los registros de seguridad socialDel total de afiliaciones generadas en los 12 meses de 2024, el 42,2% son atribuibles a empleados extranjeros. Esta es la proporción más alta reportada a fin de año desde que comenzaron los registros del Seguro Social en 2008. El año anterior, en 2023, se incorporaron 208.057 puestos de trabajo correspondientes a extranjeros, lo que representa el 38,6% de los trabajadores creados. Es una cifra similar a la de 2022, con 190.913 empleos extranjeros, el 40,5% del total. Desde que comenzó la recuperación de la pandemia, este fenómeno ronda el cuatro de cada diez. Incluso antes de la crisis sanitaria, la proporción había ido aumentando año tras año: en 2019, los extranjeros aportaron 132.133 nuevos empleos, el 34,4%; en 2018, 154.949 empleos, el 27,5%; en 2017, 126.042 empleos, el 20,6% del total…
Los datos de la Seguridad Social no permiten examinar el mejor momento hasta ahora del mercado laboral español durante la burbuja del ladrillo. La otra gran estadística laboral, la Encuesta de Población Activa del Instituto Nacional de Estadística, indica que la contribución de los extranjeros a la creación de empleo fue aún mayor en su momento: desde el cuarto trimestre de 2006 al mismo periodo de 2007, se crearon 522.500 puestos de trabajo y 294.700 fueron Extranjeros, el 56,4% del total. El año pasado hubo 351.600 empleos extranjeros, el 51,2% del total. Es importante señalar que la EPA es una encuesta y los datos del Seguro Social son datos administrativos. Sin embargo, la comparación ayuda a comprender la evolución de estas tendencias.
La fuerza de la afiliación extranjera también se refleja en las fluctuaciones porcentuales de un año a otro. Desde diciembre de 2023 hasta el mismo mes de 2024, el número de trabajadores extranjeros aumentó un 7,95%. Se trata de una tasa de aumento casi cinco veces superior a la de los trabajadores españoles, que se mantiene en el 1,6% en el mismo periodo. La diferencia fue aún mayor en 2023 (el número de socios extranjeros aumentó un 8,46% y el de españoles un 1,86%) y en 2022 (8,41% extranjeros y 1,6% españoles). El mayor incremento porcentual de empleados extranjeros se produjo en 2021, durante la recuperación de la pandemia, con un incremento del 9,2%. Entonces el número de españoles creció un 3,45%. Desde 2015, en los años de creación de empleo, el ritmo de crecimiento de los extranjeros siempre ha sido superior al de los españoles.
Estos aumentos aumentan la proporción de trabajadores extranjeros en la afiliación total a la seguridad social. En diciembre de 2024 ya era el 12,13% del total, más que nunca. Se trata de seis décimas más que en el último mes de 2023 (11,41%) y también supera significativamente el récord de 2022 (10,86%). Antes de la pandemia, la proporción de trabajadores extranjeros era del 9,93% de la fuerza laboral total, una cifra que ha ido aumentando constantemente desde 2016, después del final de la Gran Recesión. En 2007, en el apogeo del sector inmobiliario y al borde del colapso, eran el 10,49%. Esto significa que la proporción de extranjeros en el mercado laboral es hoy un punto y medio mayor que en aquel entonces.
La EPA, estadística favorita Según la mayoría de los expertos del mercado laboral, esta proporción aumenta aún más: según los últimos datos disponibles (del tercer trimestre de 2024), el 15,11% de la población activa son extranjeros. Esta estadística, a diferencia del registro de la seguridad social, también permite distinguir entre nacionales y personas con dos pasaportes. Los primeros representan el 79,41% de la población activa, menos que nunca, y los segundos el 5,48%, más que nunca. Diez años antes, en 2014, el 87,22% de los empleados eran españoles, el 2,1% tenían doble nacionalidad y el 10,68% eran extranjeros. Y en 2004 eran 90% nacionales, 0,5% con doble nacionalidad y 9,48% extranjeros.
En 20 provincias, los extranjeros representan ya más del 15% de la población activa
Esta tendencia es más notable en algunas áreas que en otras. Un análisis con datos de octubre Del año pasado (el desglose de diciembre de 2024 no se distribuirá hasta mediados de enero) muestra que ya hay 20 provincias donde los extranjeros suponen más del 15% de la población activa, un escenario muy diferente al de 2019, hace apenas cinco años. En aquel momento, sólo cinco provincias registraban una población extranjera de al menos el 15%.
A octubre de 2024, la proporción de trabajadores extranjeros es superior al 15% en Almería (24,2%), Baleares (23%), Lleida (22,2%), Girona (21%), Segovia (20,2%), Huesca ( 18,9%). , Barcelona (17,3%), Castellón (17,1%), Alicante (17%), Guadalajara (16,8%), Tarragona (16,7%), Cuenca (16,7%), Teruel (16%), Madrid (16%), Huelva (15,9%), Zaragoza (15,7%), Málaga (15,6%), Murcia (15,3%), La Rioja (15,2%) y Soria (15,1%). En 2019, solo superaban el 15% en Almería, Baleares, Lleida, Girona y Segovia, las cinco provincias donde ahora también superan el 20%. Además, en Almería la proporción es casi del 25%, lo que supone que uno de cada cuatro trabajadores es extranjero.
El contraste se observa en los estados federados con la proporción más baja de extranjeros, que está lejos de la media nacional. Jaén se encuentra en esta situación con sólo un 3,5% de trabajadores extranjeros. Esta provincia tiene la segunda tasa de desempleo más alta de España, sólo por detrás de su vecina Granada. Los demás estados federados con una menor proporción de extranjeros también tienen una tasa de desempleo muy alta. Se trata de Córdoba (el 3,7% de la población activa es extranjera), Cádiz (4,3%) y Badajoz (4,5%).