Generalmente, las franquicias son los nichos más acechados por aquellos que buscan replicar estos modelos de negocios exitosos en determinadas partes del mundo. Por lo que, al contrario de tener un negocio propio, existen emprendedores que le apuestan a ellas como uno de sus principales medios para lograr éxito en el mundo de los negocios.
Y las cifras no mienten. Existen estadísticas, de la consultora en negocios y franquicias Feher&Feher, que indican que el 90 % de las franquicias sobreviven luego de cinco años de actividad, en contraste al 60% de los negocios tradicionales que fracasan a los dos años de haber abierto sus puertas.
Sin embargo, entre los miedos de tener una franquicia, el saber cuál es la indicada preocupa a muchos que se quieren lanzar de esta manera al mercado.
Solo en Ecuador existe 152 franquicias, según la Asociación Ecuatoriana de Franquicias (Asofranquicias), de las cuales el 14% son marcas ecuatorianas.
Por esta razón, el portal CNNExpansión publicó una serie de recomendaciones para saber cómo y porqué elegir una franquicia, brindadas por parte de Enrique Alcázar, Director de Alcázar y compañía.
¿Cómo elegir una franquicia?
Definir las expectativas. Uno de los pasos importantes es definir el perfil y las expectativas de la inversión a realizar, tanto personales como económicas. «Hay franquicias para quienes están dispuestos a seguir los procesos y directrices del franquiciante, y hay franquicias para inversionistas ausentes que sólo quieren invertir pero no desean meterse a la operación diaria del negocio», indica Alcázar.
Buscar el concepto. El portal menciona que también es importante saber identificar el concepto del negocio que más se adecue a lo que busca el emprendedor. Para ello, Alcázar sugiere asesorarse de un experto que nos ayude a reducir el universo de opciones e identificar las que cumplan con nuestro perfil.
Evaluar el modelo financiero. Recuerde: debe asegurarse de que cuenta con la inversión suficiente para poner en marcha el negocio, evaluando todos los posibles obstáculos que se pueda encontrar en el camino. También es necesario analizar en cuánto tiempo va a recuperar su inversión y qué rendimientos le va a generar.
Realizar un análisis jurídico. En palabras de Alcázar: «Hay que tener claro tus obligaciones, derechos y en caso de que haya incumplimiento o algún problema de tu parte, cuáles son tus compromisos y responsabilidades».
Empatía con el franquiciante. Quizá a este punto no le den importancia, pero entre el franquiciatario y el franquiciante debe haber buena química, pues será una relación a mediano o largo plazo: entre las capacitaciones, asistencias técnicas, soportes, pago de derechos y regalías, etc. Un buen consejo de Alcázar es averiguar con otros franquiciatarios si determinada franquicia les han cumplido con lo que le ofrecieron, o si comprarían otra franquicia de la misma marca.