Cortesía: Diario El Telégrafo

Era el gobierno de Osvaldo Hurtado Larrea. Era 1983, dos años después de la muerte del expresidente Jaime Roldós en una accidente aéreo, y el grupo armado Alvaro Vive Carajo (AVC) robó las espadas de Eloy Alfaro del Museo de Guayaquil. (Lea también: Cuando Juan Pablo II pisó Ecuador).

Dos espadas fueron saqueadas: la de Eloy Alfaro y la de Pedro José Montero, símbolos políticos recurrentes.  De todos los ataques del AVC -con integrantes entrenados por la guerrilla colombiana Movimiento del 19 de Abril (M-19)-, este fue el primer golpe que tuvo cobertura mediática.

Carlos Vera realizó una entrevista al grupo armado Alfaro Vive carajo, al final de la década de los 80.
Carlos Vera realizó una entrevista al grupo armado Alfaro Vive carajo, al final de la década de los 80.

El día en que AVC robaronlas espadas era un jueves 11 de agosto, en el momento que el Museo de Guayaquil va a cerrar. Una guía, Sandra Villegas, se da cuenta que una persona que vestía un terno azul intentaba abrir con un destornillador la puerta de la vitrina principal del Salón de Historia, donde se guarda las cosas de Eloy Alfaro. (Lea también: El día que Abdalá Bucaram fue destituido).

Un segundo hombre aparece y le apunta con un arma; un tercero sale y la amenaza de muerte. Rompen la vitrina de un ‘cachazo’ y toman las espadas. El grupo dejó un volante diciendo que eran Montoneros Alfaristas y después serían reconocidos como Alfaro Vive Carajo. 

AVC devuelve las espadas

Cortesía: LaRepública.ec
Cortesía: LaRepública.ec

El 27 de enero del 2012, AVC decidió devolver las espadas. Los exmiembros del grupo armado Edgar Frías y Mireya Cárdenas entregaron los dos sables. Los dos exintegrantes del grupo marxista y, en ese tiempo, funcionarios públicos las entregaron a Tatiana Idrovo, presidenta de Ciudad Alfaro en Montecristi, como acto simbólico y al día siguiente se realizó la entrega oficial al presidente Rafael Correa.

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