Para ser emprendedor, no basta con ser un buen líder. Se requieren de otras cualidades esenciales. Una de ellas es ser un genio. Pero con genio no nos referimos a una persona con coeficiente intelectual alto. Sino a aquella que aspira alcanzar la excelencia y lo logra. Por eso, ser emprendedor requiere ser un genio.
De acuerdo con el diario español El Confidencial, existen cinco características que cumplen todos los genios, sin excepción. Sin embargo, a continuación te detallamos las 4 características más importantes para que veas el porqué ser emprendedor requiere ser un genio (una la descartamos porque creemos que un buen emprendedor no debe llegar al extremo de ser maniático ni egoísta).
¿Por qué ser emprendedor requiere ser un genio?
- Un genio tiene curiosidad y determinación. El profesor Mihaly Csikszentmihalyi, al elaborar su libro Creatividad (Paidós, 2008), tuvo que entrevistar a 91 genios. De las entrevistas concluyó que aquellos genios que lograron creaciones originales, tienen curiosidad y determinación. Sin importar de que existan otras personas mejores que ellas, su deseo de alcanzar la meta los lleva a lograrlo.
- Para un genio, las horas dedicadas a su especialidad son más importantes. No siempre tener buenas notas académicas es un indicio de que somos excelentes. La práctica hace al profesional. La práctica hace al emprendedor.
- Un genio es crítico con su trabajo. En la vida nada es perfecto, pero uno puede tratar de similar esa perfección. Para ello, se necesita repasar una y otra vez nuestro trabajo, y no confiarnos de que hacemos las cosas bien. De acuerdo al psicólogo Howard Gardner, premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales en 2011, “Los individuos creativos emplean una considerable cantidad de tiempo en reflexionar acerca de lo que quieren alcanzar, si han tenido éxito o no y, si no lo han logrado, qué deben hacer diferente”.
- Un genio trabaja siempre por pasión y no por dinero. El amor a lo que hacen les lleva a hacer bien el trabajo. En ocasiones, hacer una actividad porque nos gusta resulta mejor hecha que hacerla por obligación. Un emprendedor no busca nada a cambio, sino hacer lo que le apasiona, y hacerlo bien.