Hace 50 años, uno de los discursos más importantes de la historia moderna fue pronunciado. Hace 50 años, Martin Luther King, frente a casi 250 mil personas reunidas en Washington, decía que tenía un sueño, un sueño en el que Estados Unidos entendía verdaderamente el significado de la palabra “libertad” y tanto negros como blancos podrían sentarse armoniosamente en la mesa de la hermandad. Ese discurso, el icónico I have a dream, ocurrió hace exactamente medio siglo, el 28 de agosto de 1963. Y por eso, para inspirar a nuestros emprendedores, hoy lo recordamos.
Luther King pronunció su más famoso discurso en medio de una revolución social en Estados Unidos: la lucha por los derechos civiles y la igualdad estaba en efervescencia, después de que la brutalidad policial contra los negros había encendido los espíritus en contra del status quo. El premio Nobel de la Paz, por ese entonces, tenía como objetivo extender en el imaginario público los derechos de sus compatriotas afroamericanos para que pudieran votar y ser tratados en igualdad de condiciones que cualquier ciudadano americano. “No descansaré mientras los negros de Mississippi no puedan votar y los negros de Nueva York crean que no tienen por qué votar”, anunciaría más tarde.
Pero una de las historias que hasta hace poco no se conocía sobre el discurso ‘I have a dream’ es que la noche antes de que Luther King lo pronunciara, sus asesores le dijeron que suprimiera esa frase (I have a dream, o Yo tengo un sueño, en español) porque era un cliché. Incluso, la versión final del discurso no contenía esa parte, pero mientras estaba de pie frente a la multitud, el orador decidió pronunciarla. Y hasta hoy, 50 años después, le agradecemos que lo haya hecho. Porque como él, los emprendedores también “tenemos un sueño”.