Pepsi sorprende con un atrevido anuncio en el que el legendario Papá Noel abandona la tradición y elige Pepsi Zero Sugar en lugar de su eterna compañera Coca-Cola.
Si creyéramos que la Navidad era el lugar sagrado de la tradición, Pepsi Este año ha venido para revolucionarlo todo: La marca ha lanzado una campaña donde El mismísimo Papá Noel (Sí, el de la barba blanca y el traje rojo) Se distancia de la imagen que lo asocia a Coca-Cola desde hace décadas. Ahora, en el corazón de Nueva York, el bueno de Papá Noel no sólo lleva una bolsa llena de regalos y una mirada de «incógnito», sino también botellas con ellos. pepsi cero azucarTu nuevo refresco favorito.
Un cambio de hábito con acento neoyorquino: de Coca-Cola a Pepsi
El Papá Noel de Pepsi no es el habitual personaje adorable y nostálgico. En esta versión, Papá Noel tiene una actitud descarada: Lleva gafas oscuras y una gorra negra y, con su marcado acento neoyorquino, parece más cómodo buceando en el Bronx que en el Polo Norte. Se le ve entre una sonrisa pícara y dificultad para usar su celular “pilado” Disfruta de un refresco que, según la marca, “supera en sabor a Coca-Cola Cero Azúcar”.
La campaña creada por la agencia. VaynerMediase difundió en las redes sociales con publicaciones que captan a Papá Noel en ambientes urbanos: saliendo de una estación de metro con una bolsa de Pepsi, posando con una lata en la mano o incluso participando en el conocido evento. SantaCon Nueva Yorkdonde desfilan cientos de personas disfrazadas de personajes navideños.
El Papá Noel más irrespetuoso es Pepsi y estos son sus regalos
En este caso, como informa AdAge, la campaña va acompañada de un mensaje claro: “Esta temporada reescribimos la tradición”, en palabras de Jenny Danzi, jefa de marketing de Pepsi. El objetivo es hacer sonreír a los consumidores y atraer a los consumidores a probar Pepsi Zero Sugar. Por eso y A través de una carta de Santa escrita en las notas del móvil, la marca ofrece un reembolso de hasta $2,50 a aquellos que compren una botella de 20 onzas antes del 31 de diciembre y envíen un mensaje de texto con la palabra «Taste» al número proporcionado.
Con esta estrategia, Pepsi pretende transformar una simple promoción en un movimiento capaz de desafiar el dominio emocional y cultural que Coca-Cola ha construido en torno a Santa Claus. No olvidemos que fue la marca de la botella roja la que encargó al ilustrador Haddon Sundblom en los años 30 la creación de la icónica imagen de Papá Noel: un hombre regordete de mejillas sonrosadas y traje rojo. Esta visión dio forma al imaginario colectivo y continúa hasta el día de hoy.
Un guiño atrevido de Pepsi que marca nuevos estándares
La medida de Pepsi no es sólo un desafío a la competencia, sino también un ejercicio de irreverencia publicitaria. Mientras Coca-Cola mantiene su narrativa clásica y emotiva, Pepsi apuesta por el humor y la modernidad. Es un golpe que no pasa desapercibido, especialmente en un momento en el que las redes sociales amplifican cualquier mensaje creativo.
Y en las publicaciones de Instagram, Aparece Papá Noel con una sonrisa pícara, como si estuviera disfrutando de su pequeña “rebelión”. En una imagen sale de una tienda con una bolsa llena de botellas de Pepsi. En otra, posa con un bastón de caramelo en una mano y una lata azul en la otra. Cada imagen transmite un mensaje de ruptura: hasta el personaje más tradicional puede cambiar.
Aunque, como era de esperar, la campaña provocó reacciones encontradas. Los partidarios de Coca-Cola ven esta acción como una provocación innecesaria, mientras que los partidarios de Pepsi celebran el coraje y la creatividad de la marca. Los comentarios no tardaron en llegar a las redes sociales.. Desde elogios como “¡La mejor promoción navideña!” hasta chistes como “Papá Noel está en su época rebelde”, la estrategia ha logrado algo innegable: llamar la atención.
En definitiva, Pepsi ha demostrado que también en Navidad hay espacio para la creatividad y la audacia. Al hacer que Santa cambie el rojo por el azul, la marca no sólo desafía a su competidor directo, sino que también sugiere una reflexión más profunda: las tradiciones existen para disfrutarlas, pero también para reinventarlas. y quien sabe Quizás este año muchos brinden con Pepsi Zero Sugar mientras esperan la llegada del hombre de la barba blanca.