Ambos términos escritos en inglés significan Punto de Compra (POP) y Punto de Venta (POS). Son muy utilizados en el ámbito de ventas y a pesar de que suenan similares, tienen diferencias muy notorias. Una vez que comprendas la diferencia e importancia de cada uno por separado, podrás sacarle el máximo provecho a tu inversión o inversiones en marketing.
Se utilizan ya que ambos comprenden estructuras muy llamativas que resultan eficaces. Por un lado, el punto de compra puede ser considerado como una exhibición. La cual servirá mucho para llamar la atención de los consumidores. Mientras que el punto de venta es el lugar único donde los consumidores completan una venta. En pocas palabras se trata de la caja, allí se realizará cualquier tipo de transacción que permitirá concretar una venta sólida.
Ambos son necesarios ya que se complementan el uno al otro, juntos logran que los productos puedan destacarse de manera individual. Aumentando así la posibilidad de compra por parte de los consumidores. Su utilidad también resalta en que ambos materiales provocan las muy populares compras compulsivas. Recuerda que a pesar de que los consumidores ya tengan mentalizado los productos que comprarán, una buena estrategia con materiales POP y POS logrará que decidan salirse de su proceso de compras normal y adquieran productos de manera inesperada.
Fuente: InformaBTL