Antes que nada es importante conocer a Ripple, se trata de un sistema por el cual se pueden realizar transacciones con criptomonedas. Gracias a este sistema se pueden hacer pagos e intercambiar divisas digitales. Es básicamente como un agente de confianza, ya que Ripple afirma si la transacción se realizó.
Ahora, XRP es un token que radica dentro del mismo sistema Ripple, el cual se encargaba con la finalidad de fungir como si fuera la red SWIFT, además de cambiar la capa de finalización de las principales instituciones financieras. Lo que significa que por cada ocasión en que un usuario realizaba una transacción en Ripple, se tomaba una pequeña cifra de XRP como tasa para el intercambio. El monto mínimo era de 0,00001 XRP. Esta es mucho más baja que la que cualquier banco utiliza para transacciones extranjeras alrededor del mundo. Es importante no confundir XRP con Ripple, ya que el primero es un token y el segundo se trata de una empresa.
La diferencia entre el XRP y el resto de criptomonedas, radica en que el primero no puede minarse. Cuando surgió esta criptomoneda fue creada una cantidad finita de la misma. Además de que al finalizar cada transacción, una pequeña parte del XRP se destruía. Lo cual provocaba que la cantidad global de la criptomoneda disminuyera.
Muchas personas en el mundo afirman que XRP es una estafa, sin embargo, esto es una opinión controversial, ya que al igual que dicen eso sobre otras criptomonedas, como el Ethereum. Su modelo de negocios es un esquema que trata únicamente a la compra y venta de divisas digitales y promueve el incremento de su valor.
Fuente: El rincón del emprendedor