El 5G es la quinta generación de redes móviles que viene después de la ya conocida tecnología 4G, que permitirá un salto en velocidad, capacidad y tiempos de respuesta en la comunicación entre dispositivos móviles, que tendrá importantes consecuencias en diferentes aspectos de la vida cotidiana, la seguridad y la economía en todo el mundo.
Esta red también apoyará a servicios revolucionarios que van desde sistemas de transporte autónomos, redes inteligentes, dispositivos conectados, fabricación inteligente, vehículos autónomos, telecirugía, y mucho más, todo gracias al hecho de que aumenta la velocidad, disminuye la latencia y permite un mayor número de dispositivos conectados al mismo tiempo en menos espacio.
¿Por qué se dice que la 5G es mala para salud?
Igual que con telefonías celulares previas, la red 5G depende de las señales que envían las ondas de radio que son parte del espectro electromagnético transmitidas entre una antena o torre de comunicaciones y tu teléfono.
Todo el tiempo estamos rodeados de radiación electromagnética, desde señales de radio y televisión hasta todo tipo de tecnologías, incluidos los celulares y de fuentes naturales como la luz solar.
El problema es que la OMS sigue siendo poco clara con las recomendaciones, ya que insiste en que aún deben de hacerse más pruebas para llegar a una conclusión a la que podremos tener acceso en 2022.
Aún así, la respuesta oficial de la OMS en estos momentos puede leerse en su página web desde febrero de 2020:
Hasta la fecha, y después de muchas investigaciones realizadas, no se ha relacionado causalmente ningún efecto adverso para la salud con la exposición a tecnologías inalámbricas.
Las conclusiones relacionadas con la salud se extraen de estudios realizados en todo el espectro de radio pero, hasta ahora, solo se han llevado a cabo unos pocos estudios en las frecuencias que utilizará 5G […] Los niveles de exposición a la radiofrecuencia de las tecnologías actuales dan como resultado un aumento insignificante de la temperatura en el cuerpo humano […] no se anticipan consecuencias para la salud pública.
La 5G utiliza ondas de frecuencia más alta que las redes previas de telefonía celular, lo que permite que más dispositivos tengan acceso a internet todo el tiempo y a velocidades más rápidas.
Estas ondas viajan distancias más cortas a través de espacios urbanos, de manera que las redes 5G requieren más torres de transmisión que las tecnologías previas y deben estar posicionadas más cerca de la superficie terrestre.
Conspiraciones
La radiación electromagnética utilizada por todas las tecnologías de telefonía celular ha llevado a que algunos se preocupen por sus riesgos a la salud, como desarrollar ciertos tipos de cáncer.
En 2014 la Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó que:
«No se han establecido efectos adversos a la salud causados por el uso de teléfonos celulares».
Sin embargo, la OMS junto con la Agencia Internacional para la Investigación de Cáncer clasificó toda la radiación de las frecuencias de radio (señales de móviles forman parte) como «posibles carcinógenos«.
Fue puesta en esta categoría porque «hay evidencia que no llega a ser concluyente de que la exposición puede causar cáncer en humanos».
Defensa de 5G
De todas las teorías que han ido apareciendo, ninguna de ellas confirmada.
La investigación más sensata la tiene el artículo The Impact of 5G network on Human Health, publicado por Enxhi Shkurta, del Departamento de Teoría de la señal de la UPC, Barcelona, junto con Maria Ntemiri, de la Lancaster University (UK) y Burak Karabulut, de la Bilkent University.
En el artículo indican que se cree que la 5G es dañina por el siguiente motivo:
Para que logre su objetivo de rendimiento esperado en términos de capacidad, tiene que depender de varias tecnologías y técnicas como la densificación.
MIMO (sistema con múltiples antes para transmitir y recibir) y mmWave (parte específica del espectro de radiofrecuencia entre 24GHz y 100GHz, con una longitud de onda corta).
Esto implica que, dado que las tecnologías actuales no se están desmantelando, la exposición a los campos electromagnéticos aumentará.
El principal efecto de mmWave en el cuerpo humano es un aumento de temperatura que puede ser peligroso de muchas formas diferentes con respecto al efecto de calentamiento en los ojos, los tejidos de la cabeza y la piel.
Pero dejan claro que 5G no debería ser motivo de preocupación, ya que las evidencias actuales no muestran ningún daño.
La OMS afirma que las exposiciones de frecuencia electromagnética debajo de los límites recomendados en las regulaciones del ICNIRP no parecen tener ninguna consecuencia conocida en la salud.
Sin duda, las nuevas tecnologías continuarán ampliando las capacidades de la humanidad para transformar el mundo.
Fuente: wwwhatsnew