Si algún día ha soñado con que su emprendimiento se promocione en unos Juegos Olímpicos quizás deba replantearse esa aspiración. Y es que a pesar de que el evento se ve en todo el mundo (en Estados Unidos y España la ceremonia inaugural batió records de audiencia con 21,5 millones y 5,6 millones de televidentes respectivamente) los patrocinadores que hicieron el mega gasto (100 millones de dólares por cada “socio mundial” y 63 millones por cada “socio oficial” ) para poner sus marcas dentro de las transmisiones no han de sentirse tan a gusto con los resultados de esa inversión, según un informe publicado por Reserch Now y analizado por la revista Forbes.
Los resultados de dicho estudio revelan que los consumidores, en realidad, ni siquiera saben con certeza qué marcas son auspiciantes de los Juegos Olímpicos, entre otros datos que, tras haber invertido tanto dinero, a las grandes empresas no les han de hacer ninguna gracia. Estas son algunas de las conclusiones a las que llegó el estudio, que entrevistó a 7200 consumidores de Australia, Canadá, Francia, Alemania, Reino Unido y Estados Unidos:
- La mayoría de consumidores considera que la relación de patrocinadores como McDonald’s y Coca-Cola con las Olimpiadas es “inapropiada”, debido a que estas dos empresas no representan los valores olímpicos y fabrican productos que no se conjugan con el tipo de alimentación que consumiría un deportista de élite.
- El 60% de los americanos consultados cree que Nike es uno de los auspiciantes. No lo es, el auspiciante es Adidas.
- El 62% de los encuestados dijo que no compraría productos de un sponsor de las Olimpiadas.
- El 21% de los encuestados británicos cree que Red Bull es un sponsor. No lo es.