Actualización: Phil Schiller, vicepresidente de Apple, confirmó en una entrevista con Shangai Evening News que su compañía no está desarrollando ningún iPhone barato ni de plástico. Desmintió la publicación de The Wall Street Journal diciendo que no se desarrollaría un dispositivo similar, ni en un futuro cercano.
Pese a que no se ha caracterizado por seccionar su mercado y siempre ha apuntado a consumidores ‘élite’, Apple está considerando lanzar una versión más barata de su iPhone dirigida, principalmente, hacia los mercados emergentes, entre los que por supuesto se incluye Ecuador. Según han revelado los medios The Wall Street Journal y Bloomberg, la compañía de la manzana ha estado trabajando en este iPhone barato al menos desde febrero de 2011 y a finales de este año este proyecto por fin podría ver la luz.
La tesis, que ha sido replicada por la prensa mundial, es esta: Según señala El País, Apple está desarrollando un iPhone que podría costar entre 99 y 149 dólares, sería más económico que el iPhone 5 porque estaría fabricado con componentes menos costosos, como una cubierta de policarbonato plástico, menos lujosa que la actual, hecha a base de aluminio.
A pesar de que los responsables de la compañía fundada por Steve Jobs se han negado a comentar sobre esta hipótesis, analistas tecnológicos especulan que el iPhone ‘low cost’ sería la apuesta de Apple para competir con otros fabricantes, como Samsung y el ejército de firmas que emplean el sistema operativo Android, de Google, usado por el 75% de los de smartphones del mundo en el tercer trimestre del 2012, según IDC.
Y a pesar de que la noticia suena bien, algunos críticos han puesto esa positividad en tela de duda. Uno de ellos es el español Javier Martín, quien escribió una opinión en El País donde sostiene que este cambio de estrategia podría ser una traición a los cimientos de Apple.
“Jobs había conseguido que su público se sintiera diferente con sus productos, aunque fuera pagando más. A cambio, su mercado era reducido”, opina Martín. Su teoría es que esa ‘exclusividad’ se está perdiendo a medida que la marca se está volviendo cada vez más masiva: “si todos son exclusivos, se deja de serlo. Si todos tienen un aparato Apple, más pronto que tarde será del montón, no diferentes”, considera él. ¿Qué opinas tú?