Con McDonald’s incursionando en la “gastronomía ecuatoriana”, mediante lo que ellos han denominado el menú Nuestro Sabores, es válido saber de dónde viene esta marca, que se instaló en Ecuador hace 15 años y –hasta marzo de 2010, según su web oficial- operaba un total de 21 locales en todo el país, dando trabajo a más de 900 personas. Para los emprendedores ecuatorianos interesados en saber cómo empezó todo, esta es la historia de McDonald’s…
La vida de esta cadena de comida rápida comenzó en 1930, cuando los hermanos Richard y Maurice McDonald, originarios de Nuevo Hampshire (noreste de Estados Unidos), se mudaron a California en busca de oportunidades laborales. En el condado del sol, según el libro “McDonald’s, la empresa que cambió la forma de hacer negocios en el mundo”, Richard y Maurice tuvieron sus primeros trabajos arreglando escenarios para cortometrajes, pero –cuando notaron que el automóvil se estaba volviendo esencial en la vida de los californianos- decidieron abrir un restaurante de autoservicio en Pasadena, en 1937, donde no solo vendían hamburguesas, sino también asados y otras comidas.
Tres años más tarde se mudaron a San Bernardino, ciudad que pasaría a la historia por acoger el primer restaurante McDonald’s, el original. El restaurante de los hermanos, a pesar de tener un éxito discreto como autoservicio en el mercado de los consumidores adolescentes, cambió su concepto en 1948, buscando atraer más familias. Fue por ese entonces que la rapidez del servicio se convirtió en la nueva religión de este emprendimiento.
Para posicionarse como restaurante de comida rápida, los hermanos McDonald optimizaron sus procesos enfocando su menú en las hamburguesas. Esa decisión, según una tesis empresarial hecha por la Universidad de la Américas de Puebla (México), les permitió preparar los alimentos que vendían mediante tareas simples y de repetición, lo que a su vez les daba la oportunidad de contratar a cocineros inexpertos, que cobraban menos, sin sacrificar la calidad de sus productos.
Entonces, la estrategia de los McDonald se basaba en rapidez, calidad y precios bajos. Facturando cerca de 350.000 dólares anuales para mediados de los años 50, el negocio atrajo a un empresario reconocido por la web de McDonald’s como el verdadero fundador de la cadena. Ray Kroc, un vendedor de batidoras para hacer malteadas, se unió al emprendimiento consiguiendo los derechos para comercializar la marca y empezando el camino para convertirla en global. Fue él quien se encargó de llevar el restaurante a otras latitudes: primero abrió una sucursal en Illinois, luego se expandió al resto de Estados Unidos y, finalmente, a los cinco continentes.
